La ministra de Educación, Patricia Correa, y el ministro de Cultura, Jair Pérez, presentaron su renuncia irrevocable a sus cargos en medio de la fuerte crisis política que vive el país.

Ambos no cumplieron ni una semana como ministros de Estado y dieron un paso al costado luego de conocerse las muertes de más peruanos en el interior del país, que empezaron a incrementarse tras los enfrentamientos que alcanzaron un altísimo punto de violencia en la región Ayacucho el 15 de diciembre.

“Nuestro país enfrenta una crisis política de grandes dimensiones, que demandan convicciones democráticas, respeto al orden y a la vez a la integridad física y la vida de cada ciudadano peruano que, lamentablemente, se han visto vulneradas en las últimas horas”, se lee en el documento difundido por Correa a través de su cuenta de Twitter.

De igual manera, Pérez argumentó que los veinte fallecidos por las protestas hacían insostenible su permanencia en el cargo.

Diversos sectores han calificado estas renuncias como la traición caviar al Gobierno de Dina Boluarte, en un momento en el que las fuerzas democráticas la respaldan para que reestablezca el orden en el país.

Esta mañana he presentado mi carta de renuncia al cargo de Ministra de Estado en la cartera de educación. La muerte de connacionales no tiene justificación alguna. La violencia de Estado no puede ser desproporcionada y generadora de muerte. #NoMasMuerte pic.twitter.com/0qoZisc9Yc

— Patricia Correa (@correapatricia) December 16, 2022