Los oficiales retirados de la Marina de Guerra del Perú, reunidos bajo la agrupación "UNIÓN NAVAL", emitieron un enérgico pronunciamiento tras el ataque perpetrado el pasado sábado 2 de diciembre a la Minera Poderosa, situada en la provincia de Pataz, Región de la Libertad.

Calificaron el incidente, que resultó en la trágica pérdida de 10 compatriotas y dejó a 15 personas heridas, como un acto terrorista que atenta contra la República del Perú. Alertaron sobre las graves consecuencias de este tipo de acciones en la seguridad interna del país, advirtiendo sobre el impacto negativo en la inversión privada, las exportaciones y el PBI, con repercusiones impredecibles para el año 2024.

El comunicado enfatiza la necesidad de una respuesta firme por parte de las autoridades bajo el liderazgo de la Presidenta de la República para detener la crisis que se está gestando y restaurar las condiciones necesarias para el desarrollo del país. Además, instan a aquellos funcionarios que no se sientan capaces de enfrentar esta situación a apartarse en favor del bienestar nacional.

El grupo "UNIÓN NAVAL" expresó sus condolencias a los familiares de las víctimas y solidaridad con los heridos y la Minera Poderosa, condenando enérgicamente este acto de violencia y llamando a la unidad para salvaguardar la estabilidad del país.