En su discurso por 28 de julio, la presidenta de la República, Dina Boluarte, criticó duramente la gestión de su predecesor, el expresidente Pedro Castillo, a quien calificó de "errático" y "deficiente".

Sin embargo, a pesar de estas críticas, Boluarte ha decidido mantener en vigor las normas establecidas por Castillo, las cuales han sido señaladas por facilitar la corrupción a través del secretismo.

Esta aparente falta de transparencia ha sido evidenciada en diversas respuestas a solicitudes de información presentadas desde mayo de 2023. El Gobierno se ha negado a proporcionar el registro de ingresos a la residencia presidencial, lo que ha generado inquietudes sobre la falta de apertura y claridad en su administración.

El Palacio Presidencial ha justificado sus acciones utilizando varias justificaciones, basadas en una normativa que expertos consultados por el medio han considerado como "ilegal" desde su emisión. Esta situación plantea preocupaciones sobre el compromiso real del gobierno actual con la transparencia y el combate a la corrupción, a pesar de las críticas expresadas hacia la administración anterior.