El coronel Henry Chingay expresó su indignación luego de que la fiscal Jessica Gomero Palomino liberara a 16 de los 21 extranjeros intervenidos en un allanamiento en Ate, donde se encontraron drogas, armas de fuego y cacerinas de uso militar.

El operativo policial, realizado el 23 de abril, apuntaba a desarticular una presunta organización criminal dedicada al microtráfico, proxenetismo y extorsión, pero apenas dos días después, la mayoría de los detenidos recuperó su libertad por decisión fiscal.

La Policía Nacional informó que el edificio de seis pisos intervenido funcionaba como centro de operaciones de esta organización y que incluso se hallaron seis menores de edad en el inmueble. La liberación de los extranjeros generó malestar entre los agentes, quienes señalaron que aún quedaban diligencias pendientes y que los elementos incautados justificaban una investigación más exhaustiva.

En entrevista con TV Perú, el coronel Chingay lamentó que la fiscalía considerara insuficientes las pruebas encontradas en el operativo. “¿Un arma de fuego y droga decomisada no son suficientes para abrir una investigación de quince días? ¿O necesitamos ver a una persona ejecutando un crimen para iniciar una investigación?”, cuestionó el oficial.

Además, el coronel advirtió que apenas una hora después de la liberación de los intervenidos se registró un atentado contra un vehículo del corredor rojo, aunque evitó afirmar que ambos hechos estuvieran relacionados. Sin embargo, indicó que en este tipo de casos “no se descarta nada” en el curso de las investigaciones.

Parte de la resolución fiscal también ordenó la devolución de los bienes incautados a los investigados, una decisión que, según Chingay, debilita el trabajo policial y envía un mensaje equivocado frente a la lucha contra el crimen organizado en Lima.