El índice de confianza del consumidor para Lima Metropolitana se ubicó en 34 puntos, nuevo récord mínimo histórico que para superarlo tendríamos que retroceder hasta febrero de 2004, cuando se obtuvo 31 puntos.

De esta manera, son 28 los meses que en forma consecutiva ubican la confianza del consumidor en terreno pesimista, y las principales razones son la aceleración de la inflación (que llegó a un 6.8 % anual en el mes de marzo), y la subida de los precios de los alimentos de primera necesidad.

Según el informe de Ipsos y Apoyo Consultoría, el 58 % de los consumidores limeños tienen la percepción de que los precios de hoy son más altos que los de hace un año.

Los ciudadanos perciben que las medidas del Gobierno han sido poco efectivas cuando en paralelo crece el deterioro de la gestión pública, hay un estancamiento del salario real y el empleo se vuelve más precario.