El juez Juan Carlos Checkley aceptó el requerimiento de la Fiscalía de dictar prisión preventiva por 36 meses contra el expresidente golpista Pedro Castillo y sus ministros Geiner Alvarado y Juan Silva, por la presunta organización criminal enquistada en su gobierno.

A Pedro Castillo también se le imputan los delitos de colusión y tráfico de influencias, y la medida impuesta busca que tanto él como sus ministros no perturben el proceso en libertad.

Para proceder con la prisión preventiva, primero el juzgado confirmó que existe la sospecha de la comisión del delito, asimismo, que la posible condena sería mayor a 4 años, en este caso de 32 años.

A ello se suma de que no tiene arraigo domiciliario, y sobre el peligro de fuga se explicó que el vínculo con su familia está debilitado, puesto que su esposa y sus hijos están fuera del país y bajo protección de un Gobierno extranjero; frente a ello, él podría encontrar refugio en la embajada de México.