El recluso expresidente Pedro Castillo usó los minutos que le concedieron en la audiencia en la que se evaluó el pedido de 36 meses de prisión preventiva en su contra, para criticar al Congreso, a la prensa y para decir que los colaboradores eficaces que lo acusan son comprados.

Durante la audiencia, la fiscal Galinka Meza dijo que se considera a Pedro Castillo como líder de una organización criminal que buscó copar puestos claves en el Estado para facilitar licitaciones y compras a favor de terceros que realizaban pagos ilegales a favor del expresidente y sus exministros Silva y Alvarado.

En su alocución, el golpista exmandatario señaló que los congresistas que respaldaron la denuncia constitucional en su contra también deberían ser considerados parte de la organización criminal porque se pasearon en su mayoría por las oficinas del despacho presidencial.

Dijo Castillo que los legisladores le pidieron “500 millones de soles para que se repartan en sus bancadas” cuando junto a sus ministros fueron a pedir presupuesto para ejecutar obras en el país.