Los miembros del grupo "UNIÓN NAVAL," conformado por oficiales retirados de la Marina de Guerra del Perú, han expresado su profunda preocupación por la reciente decisión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en relación con la denuncia presentada a favor del terrorista Víctor Polay Campos.

En un comunicado oficial, el grupo señaló que es inaceptable que la CIDH haya admitido a trámite la denuncia a favor de Víctor Polay Campos, un individuo conocido por su participación en actos de violencia y terrorismo.

Lo más preocupante es que se ha alegado que esta información fue compartida con el gobierno peruano en 2021, durante la presidencia de Francisco Sagasti, y que supuestamente fue ocultada, lo que consideran una traición a la patria.

El grupo "UNIÓN NAVAL" también señala la posibilidad de complicidad por parte de la Representación Permanente del Perú ante la Organización de Estados Americanos (OEA), el Ministerio de Relaciones Exteriores y la Presidencia del Consejo de Ministros.

Ante esta situación, "UNIÓN NAVAL" reafirma su posición de que el Perú debe retirarse de la competencia contenciosa de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), argumentando que esta instancia ha perjudicado a Perú en el pasado al favorecer a terroristas y socavar la soberanía y seguridad nacional. También expresan su preocupación por el posible sesgo ideológico de la Corte IDH.

El grupo hace un llamado al Congreso de la República, al Poder Judicial y al Ministerio Público para que realicen investigaciones exhaustivas y tomen las acciones políticas y legales pertinentes si se determina que hubo ocultamiento de la denuncia presentada a favor de Víctor Polay Campos, considerando esta situación como una afrenta al Perú y un riesgo potencial para el país.