La tensión en la región de Israel y Gaza aumenta a medida que el brazo armado de Hamás anuncia su intención de ejecutar a un rehén israelí por cada bombardeo que Israel lance sin previo aviso. Actualmente, se mantienen al menos 130 personas como rehenes por parte de la milicia islamista.

El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha emitido un llamado a los partidos de oposición para formar un Gobierno de emergencia sin condiciones previas. "Ahora los líderes necesitamos unirnos", expresó en un mensaje a los medios. Paralelamente, el ministro de Defensa de Israel, Yoav Galant, anunció que el presidente ordenó el bloqueo total de la Franja de Gaza, lo que implica la suspensión de suministros de electricidad, comida y combustible.

Las fuerzas armadas israelíes informaron que han recuperado el control de localidades en el sur del país cercanas a la Franja de Gaza, en un intento por contener a Hamás.

Según el Ministerio de Sanidad de Gaza, los ataques israelíes han resultado en la muerte de 687 personas, incluyendo aproximadamente un centenar de niños, y más de 3,700 heridos. En Israel, el conflicto ha causado más de 700 víctimas mortales y 2,300 heridos.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha informado que al menos 11 ciudadanos estadounidenses murieron en los ataques de Hamás en Israel y expresó su preocupación por la posible presencia de estadounidenses entre los rehenes secuestrados por Hamás. El secretario de prensa del Departamento de Defensa de EE. UU., John Kirby, afirmó que el número de ciudadanos estadounidenses fallecidos podría ser mayor.

La comunidad internacional sigue haciendo llamados a la contención y busca mediaciones para poner fin a la escalada de violencia en la región, mientras el conflicto continúa desarrollándose.