Esta semana comenzó el embarque del primer lote de trenes destinados al proyecto ferroviario Lima-Chosica, gestionado por la Municipalidad Metropolitana de Lima. El lote inicial, compuesto por 45 vagones y 10 locomotoras, parte desde el puerto de Stockton, California, y se espera que arribe al Callao en la primera o segunda semana de julio. La operación fue supervisada en persona por el alcalde Rafael López Aliaga, quien lidera la iniciativa de reactivación del antiguo Ferrocarril Central.

A pesar de que los trenes provienen del sistema Caltrain de San Francisco y tienen más de cuarenta años de uso, fueron reacondicionados para su nueva función en la capital peruana. Están construidos con acero inoxidable, lo que garantiza resistencia al desgaste y una mayor durabilidad ante el uso intensivo. Cada vagón fue inspeccionado y reacondicionado antes del envío, asegurando condiciones operativas adecuadas para el servicio urbano.

Una de las principales innovaciones del sistema es la inclusión de vagones de doble nivel, una estructura que permite transportar a más pasajeros sin sacrificar comodidad. Cada unidad está equipada con aire acondicionado, asientos espaciosos, baños modernos y áreas reservadas para el transporte de bicicletas, integrando un enfoque de movilidad más sostenible e inclusivo en comparación con el transporte público tradicional de Lima.

El proyecto busca beneficiar principalmente a los distritos del este de la ciudad, con una ruta que abarcará desde Chosica hasta el centro de Lima en su primera etapa. La meta es aliviar la congestión vehicular en zonas críticas como Huaycán, Santa Clara, Huachipa y Chaclacayo, conectando eventualmente con la Línea 2 del Metro de Lima para ofrecer un sistema de transporte más eficiente e intermodal.

Según lo anunciado por la comuna, esta donación ferroviaria representa un ahorro aproximado de dos mil millones de dólares frente al costo de adquirir trenes nuevos. López Aliaga también adelantó que ya se gestiona un segundo embarque y que existen contactos para ampliar el modelo a otras ciudades como Huancayo y Juliaca, con el objetivo de extender este modelo de transporte a más regiones del país.